martes, 26 de enero de 2016

Marruecos, tanto por descubrir

Debo empezar esta entrada confesando que Marruecos es para mí un gran desconocido. No en el sentido estricto de la palabra, pero sí en el fondo. El país vecino, fue el primer país árabe que visité. Algunos de sus habitantes me llevarían la contraria ahora mismo diciendo que no son árabes y tienen sus razones. Pero, oficialmente Marruecos es un país árabe y musulmán y en él empecé mis aventuras. Lo he visitado en varias ocasiones, y cada vez que voy tengo más ganas de volver y descubrir.

Decir que has estado varias veces en Marruecos no es decir que lo conoces, como podrías decir por ejemplo, de Túnez. Marruecos es una gran extensión de tierra en el norte de África, en la que puedes encontrar paisajes y personajes variopintos allá donde vayas. Desde las playas mediterráneas del norte y las montañas del Rif hasta el desierto en el sur y las olas del Atlántico, pasando por el alto Atlas en el que no puedes dejar de disfrutar del paisaje de montaña.

Puedes viajar en plan lujo o mochilero, relax o aventurero, cultural o de compras. Viajar organizado o por libre. En coche, en avión, en transporte público. En pareja, con amigos o en familia. Todo cabe en ese país, todo es cuestión de elegir el lugar en cada momento. Marruecos es una territorio fértil, rico, tiene muchísimo potencial y está en constante desarrollo. Conoce el turismo desde hace muchísimo tiempo y sus gentes están dispuestas siempre a recibir a los extranjeros.

Puedo sentir que  mi sensación cuando viajo a Marruecos es la de estar en casa, entre mi gente. Me siento cómoda y acogida y bien tratada. Creo que podría ir un millón de veces y siempre querría volver, además siempre con algo nuevo que descubrir.

Iré compartiendo algunos de los lugares en los que he estado, como siempre esperando que os guste y os sea útil. Inchallah.